El principal objetivo del proyecto es el desarrollo y diseño de una planta piloto demostrativa con una capacidad de depuración de 5.000 dm3/hora, que permita eliminar entre un 97-99% de hidrocarburos, grasas y aceites de aguas residuales y dar una solución al problema existente con este tipo de residuos mejorando así la calidad de las aguas, de manera que cumpla con los requerimientos establecidos por las normativa europea vigente (91/271/EC y 200/60/EG).
Esta planta piloto está basada en un filtro fabricado con un material elastomérico específico, y que cuenta a su vez con un sistema de biodegradación utilizando microorganismos que permitan degradar o incluso eliminar la carga contaminante de los residuos y estos puedan posteriormente reutilizarse para usos secundarios o incluso llegar a eliminarse.
Se espera con el proyecto conseguir los siguientes objetivos científicos, tecnológicos y medioambientales: